¿Para qué sirve lo que no sirve en Alemania?

Lovely Planet

Ningún tren llega tarde. Ningún colectivo improvisa su parada. No hay residuo que no se recicle, ni ornamento que no esconda al menos, una funcionalidad. Esto es Alemania. En este país parece no existir peor barbaridad que perder el tiempo en algo poco eficaz, o cuya utilidad no esté testeada. Tenía que haber, en algún rincón, una rejilla en la que las corrientes de la racionalidad depositaran lo que no cabe, lo que nadie sabe para qué sirve, lo completamente inútil. Yo la encontré. Se llama Platine Fest